¿Hemos tocado techo? Esa pregunta es la que se hacían los asistentes a la montería de La Moheda, la 5ª de nuestro calendario, celebrada el pasado 4 de enero. Los animales cobrados, los lances errados, las detonaciones contabilizadas (más de 230) , los animales heridos, los agarres de los canes, las diferentes tiradas de carreras a reses diferentes (se contabilizaron 62 puestos con lances de los 70 que se montaron en total), el buen hacer de los perros en el día de hoy, guardándose las manos unos a otros, etc... Una excepcional montería la celebrada por la Sociedad de Cazadores de San Lorenzo de Calatrava, en sus dominios abiertos, sin alambradas, ni cortaderos, ni mondas (importante destacar estas características).
El día amaneció muy nuboso, con fuertes rachas de viento que se fueron acrecentando a lo largo de la jornada, con rachas que superaban los 90 km/h, para finalizar con una abundante lluvia sobre las 15.30 hrs que no paró hasta la puesta de sol, circunstancia que deslució algo el día montero que vivimos los socios y acompañantes.
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| "Obelix" en ayuda de su compañero "Astérix" (Angel ayudando a su amigo Javier a sacar el guarraco que mató el segundo) |
Buenas migas, mucho ambiente, instrucciones de rigor y sorteo de carriles primero y general después. Salida de las 11 armadas un poco embarullada, debido a la dificultad para ubicar los vehículos de cada armada en la calle de salida, única en toda la montería. De todas formas, minutos antes de la suelta, que se produjo hacia las 12.00 hrs., estaban ya todos los puestos colocados donde la fortuna les otorgó.
La armadas de Las Casillas y El Picón, fueron las primeras en comenzar las hostilidades, saliendo los cochinos de sus encames con la colocación de los primeros puestos... José Martín cobró 3 guarros y tiró sobre una piara de 10 sin poder cobrar ninguno más.
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| Juan pradas y su "percha" |
Basi, tirando sobre otra piara de 6 enormes guarras que a los tiros, se remolineaban nuevamente, pudiendo repetir varias veces, sólo pudo quedarse con una; José abatió otra guarra y remató un venado que venía pinchado del postor Vicente, que además pudo disparar sobre otros 4 guaros que se salieron de la mancha hacia las escombreras... Alejandro consiguió abatir 2 guarros y un zorro también, aunque pudo haber tirado alguno más si hubiera tirado con rifle. El campeón en esta armada fue Juanitín, abatiendo 4 guarros, dejando herido otro y un zorro que también cobró. El intenso "tostoneo" en estas armadas hizo que muchos guarros blincaran hacia los Riscales y El Río, donde la armada de La Peña Escrita fue la primera en dar buena cuenta de éstos.
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| Vicente con el venado de la U. Sorda |
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| Alejandro con su fiel compañera |
Ya en Los riscales, puestos como el que ocuparon Juan López, Valentín, Ramón Pradas y Eulalio, pudieron llevarse carne a sus maleteros, consiguiendo abatir sendos marranos. En esta armada Angel, Feliciano, Pablo, Sardina, el que suscribe y Javi Ureña, pudieron incrementar el número de abates, pero fallaron en sus intentos. Buen venado el que se erró en el 8 de los Riscales, que luego fue abatido por el Presidente, y un enorme guarro que también pudo cobrar Ramón, que se fue de najas, como de costumbre en estos grandes solitarios.
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| El presi con el venado que consiguió |
En el Río, nueva armada este año, la traca era impresionante, con puestos con 3 y 4 lances cada uno... Aquí Tacho, desgraciadamente, perdió la oportunidad de su corta vida montera, fallando un guarraco de enormes proporciones, con hocico blanco y crines plateadas... Aureliano y Bernardino, con dos guarros y dos venados respectivamente, estuvieron en la pomada como siempre...
La montería se encaminaba hacia La Moheda, donde los puestos que remataba Emiliano en la Higuera Patricio también disfrutaron de lo lindo tirando 7 de los 11 puestos que la componían.
En el otro extremo de la mancha, la traviesa de Los Hundíos comandada por su postor, Pedro Ramón, pudieron hacerse con otros 6 o 7 cochinos, pero el desatino fue la nota predominante. Aquí Juan Gregorio, que también está en racha, cobró un bonito venado, errando otros dos más.
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| El venado de Juan Gregorio |
En el cierre de Las Animas, Lucía en el 2 cobró una gran guarra, Vicente padre erró un soberbio jabalí que salió escabulléndose hacia los castillones de La Loma... Y allí, en la escuadra de las Ánimas, puesto histórico conocido por todos los grandes cazadores del pueblo, cobró Javier un enorme jabalí, después de fallar otros 4 guarros más, uno de ellos mucho más grande que el abatido por él. Un guarro cuyas magníficas defensas fue el admirar de todos los monteros en la junta de carnes. Quizás sea el guarro abatido más enorme de los últimos años en el coto.
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| Magníficas defensas |
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| Javier y su enorme guarro... Enhorabuena, chaval... |
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| Lucía y su hermosa jabalina |
En el cogollo de la montería, las rehalas de Eduardito y El Rata se afanaban en desencamar los guarros que albergaba el Cerro Pedro, dando juego a las armadas de La Noguera, La Mesa y del propio Cerro. Aquí Matagatos abatió 3 marranos, Vicente una gran guarra y Bernabé un bonito venado de 10 puntas, errando muchos puestos también aquí...
La montería acabó sobre las 15.30, comenzando el resaque pasado por agua... Lluvia que se intensificó mientras los monteros descansaban deleitándose con unos buenos garbanzos del Chato.
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| Juan López y sus dos marranos, después de empaparse... |
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| Algunos animales abatidos ya están reposando... |
El resultado final ascendió a 28 guarros y 8 venados (en junta). Si a esto le sumamos los 6 guarros cobrados en agarres y otros 4 que no se sacaron de la mancha, hablamos que la montería se aproximó a la media centena de reses abatidas. Todo un espectáculo a pesar del mal tiempo...
"... Si hubiéramos tenido un buen día, se habrían cobrado 60 o 70 gorrinos..." Todos los monteros cerrábamos con esta rotunda frase la tarde, celebrando como siempre en buena compañía estas familiares jornadas cinegéticas en San Lorenzo.
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| La nueva sangre montera del Coto |
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| Juanitín, José y hermano celebrando el acierto |
Nuestra mancha La Moheda, estrella de nuestro calendario, se consolida como la mejor montería del Coto. Los resultados de los últimos años y el resultado de éste, no hacen más que confirmar que la tranquilidad, la abundante bellota y lo extenso de la mancha hacen que estos ingredientes conjuguen un "buen plato cinegético" del que pudimos disfrutar todos y del que los visitantes con envidia sana, no hacen sino agrandar la leyenda de este gran coto.
Imagino que el autor de la cronología o relato de lo sucedido es Juan María, pero sea quien sea solo merece el comentario, al igual que todas las anteriores, de excepcional, mejor contado y expresado imposible.
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